miércoles, 22 de junio de 2016

LA ODISEA DE LA e-ADMINISTRACIÓN ESPAÑOLA: UN EJEMPLO LA RENTA 2015

En plazo de la presentación de la Renta 2015, resulta que han desaparecido los impresos. Bien podemos pensar. Ahora se tramita todo digitalmente. Pero ah, amigo. Ahí empieza la odisea. Nos creemos que por transvasar a internet ciertos trámites todo está hecho. Curiosamente funciona a las mil maravillas en banca, pero no tanto en algunas administraciones como Hacienda o la Seguridad Social. De entrada, has de contar, para supuestamente agilizar los pasos al igual que para otras ventanillas, con la firma electrónica. En caso contrario has de solicitarla, obligándote a personarte en alguna dependencia (policía, administración del estado, etc) para verificar tu identidad y obtener o verificar la clave de acceso (password). Sin embargo una vez hecho ese desplazamiento, regresas a tu punto de trabajo con la esperanza de empezar a tramitar tu expediente. Sin embargo, que no se te ocurra cambiar de ordenador porque  dejarían de funcionar las claves concedidas o validadas (sólo para un solo PC) y vuelta a empezar.


 

Otro momento de gloria para acceder a determinados expedientes administrativos personales e intransferibles pasa por demandar la Clave PIN. Suena muy bien que el avance digital por fin haya llegado al arcaico funcionariado. La realidad es bien otra. Solicitar la clave PIN te obliga a hacerlo de un PC determinado y no cambiar del mismo. Sin embargo la experiencia demuestra que no puede ser un PC cualquiera: a tanto no llegan. Ha de ser viejo, cuanto más mejor, aunque esté en riesgo la vulnerabilidad de tu sistema. Si es de entorno Mac o con un sistema operativo propio de Apple (el declarante /contribuyente no tiene derecho, según la administración a trabajar con un ordenador de ese entorno), o navegador tipo Safari, Opera, etc te lo rechaza porque no está preparado el servidor público para tanta modernidad. La primera en la frente. La segunda es que has de hacerlo desde un PC con entorno Windows. Perfecto para aquellos que por cuestiones de seguridad hayan optado por migrar al Windows 10. Pues malo, porque el sistema de la administración no está al día (update) tampoco con lo último del mercado que te meten por la publicidad. Bueno, dices, probaré con un PC windows de desecho y vulnerable desde el punto de vista de seguridad de datos y virus como quien dice, con windows 8.1. Pues tampoco funciona. Ha de ser con versión anterior y a ser posible con un navegador tipo Explorer (como luego te confiesan) porque cualquier otro que el usuario a día de hoy emplea provoca otro error. Tras cabrearte y acordarte de todos los santos informáticos de la señora Administración, no te queda más remedio que llamar a un número de teléfono que nadie responde o siempre da ocupado. Otra opción: llamar a un 901 (de pago) que después de interminable espera, logras que finalmente un operario se digne a darte una solución a los (cuantiosos) errores.  Lo malo es que no parecen de esta galaxia, porque no entienden que no te funcione. Después de varios intentos, alguno  te explica que algunos de esos programas y diseños informáticos de la administración sólo operan con versiones no tan modernas. Siempre había pensado que eran los usuarios los que no se ponían al día. Resulta que es al contrario. Desistes en el intento y vuelves a llamar a otro operario confiando que esté más puesto, pero el resultado es siempre el mismo: error. Cada vez que hablas con uno de esos agentes telefónicos, cada cual tiene una explicación distinta de los errores para la clave PIN. El plazo transcurre  y tú acongojado de no llegar a tiempo porque en la España digital de la administración analógica versión punto cero el plazo para la presentación de la denominada "Renta Web " (encima con sorna) finaliza hoy o podría finalizar hoy.

Intentas acceder a través de otra variante: solicitando un "Número de Referencia" que te llega al móvil. Parece simple hasta que por SMS llega el mensajito. El fallo está, como me ha ocurrido, vincular la referencia con un móvil que previamente has utilizado para otro expediente distinto. Se conoce que se produce un acoplamiento y un mismo declarante en nombre de varios sujetos pasivos  puede tener serias dificultades para cumplir sus datos personales sin error.
No sé cómo pero cuando por milagro terminas no sabes cómo por acceder a crear tu archivo con el expediente del declarante, vuelve a aparecer otro error. Tienes que actualizar algún programa como el Java, amén de determinados plugins, drivers y otras hierbas a los que están superfamiliarizado -como todo el mundo confirmará- los contribuyentes españoles, todos ellos expertos en informática de usuario, no en programadores de Linux.

¿Se imaginan lo que a un ciudadano/contribuyente del rural se le pueda pasar por la cabeza sin windows, PCs modernos, o con entorno Mac, sin Javas plugins y otros condimentos y  a duras penas al día con una tecnología que por un lado te venden como futurista pero que cuando topas con la administración ésta emplea aún  software propio de años de María Castaña ??

Sólo te queda el consuelo de acudir por obligación al gestor de turno (previo pago de sus honorarios) para solventar unos trámites que supone cualquier mortal (urbano y rural) debería poder realizarlo sin ayuda de la NASA. Y rezar para que todos tus datos introducidos por el gestor sean correctos, porque cualquier mínima desviación de la realidad que obre en poder de Hacienda /Administración del Estado no conlleven la incoación de un expediente sancionar y la correspondiente multa. 

Esto es Españ@ en la presumida Administración digital. Aunque de digital nada, analógico pero versión 0.1

jueves, 9 de junio de 2016

EUROPA, DESPIERTA: EL SORPASSO A LA DEMOCRACIA DIGITAL

La crisis económica y del capitalismo renano (social de mercado), el paro, la corrupción galopante, la politización de los tres poderes, la impunidad y la in-justicia con causas que demoran hasta más de un  decenio, junto a la falta de consensos generales (dentro y fuera de la burocrática Europa), de valores morales y éticos, así como la excesiva bunkerización de ciertos intereses políticos por encima de los más elementales de la sociedad civil, han logrado un hecho que pocos desean admitir: el desencanto de las democracias  occidentales hasta niveles propios de la República de Weimar, amenazando el ascenso de Trump en EEUU, así como de los populismos y nacionalismos que alientan el Brexit y el Euroxit.

 En tan solo una generación, Europa (y España en particular) por su falta de coherencia, firmeza, autoridad, compromiso y dejadez moral han hecho de los valores   un campo de batalla donde todo vale. Por suerte que vivimos en el seno de la UE y la OTAN porque nunca tanto, hasta donde llega la memoria, podríamos estar "peor" que nunca. En otros tiempos allanó la senda que permitió la llegada de Hitler, las dictaduras y las contiendas mundiales. Hoy por suerte, mantenemos ciertas libertades aunque otras son continuamente pisoteadas con absoluta impunidad sin revuelos sociales: tanto para el autor como para las víctimas. Contienda mundial aunque no lo parezca sí que padecemos, ignorando cómo gestionarla en suelo europeo, debido a los conflictos próximos en el Cáucaso, Siria, Afganistán, Iraq, Oriente Medio, la llegada masiva de refugiados inmigrantes a suelo comunitario, la amenaza yihadista, el terrorismo etc  Aún así seguimos mirando a otro lado, mientras los valores democráticos se recortan y los atropellos de los más débiles no terminan de repararse.

Hoy la amenaza no es que llegue un nuevo Hitler, en todo caso el acecho al poder democráticamente de unas fuerzas nacionalistas y/o populistas (como en España, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Holanda, Austria, Hungría, Grecia o incluso EEUU) cuyo único interés no es el respeto de las mayorías  sino la imposición de unos programas políticos que parecen catálogos de venta de artículos por correo a costa de unas clases sin cuota de pantalla. Lo grave es que los electores somos los que estamos legitimando este fenómeno sin dar el merecido escarmiento a los provocadores de tanto anti-sistema por la derecha y por la izquierda. La convivencia se torna cada vez más ardua y la clase política a lo suyo: celosa de perpetuar sus privilegios analógicos y el status quo sui géneris cada vez más alejado de la realidad de la calle.


La sangre podría correr, pero nuestros valedores de los principios democráticos seguirían a la gresca haciéndonos ver que las acciones y reacciones llevan su tiempo, sus cónclaves y plazos, mutiladas a su vez por la burocracia y consultas de expertos en la teoría de los juegos. La anafilaxia en la  toma de decisiones ha contagiado al resto de los poderes públicos, instancias, actitudes y aptitudes, hasta afectar a la enseñanza, la diplomacia, el deporte, el arte o el mismo ocio forzoso. Es lo que tiene los excesos del liberalismo, digo de la Democracia analógica, que con la globalidad y el sobrevuelo de lo Digital, aún nos cuesta repensarnos y mantener la coherencia. Interna y externa. Se acabó la excusa que  todos los malos siempre lo arreglen los mismos. La decadencia europea (y española) no pueden caer más bajos. El hecho que la democracia analógica atraviese sus peores momentos no es excusa para ignorar el sorpasso de la democracia digital. Que reclama diligencia, responsabilidad, valentía, audacia, arrojo, sí hasta compasión.

miércoles, 1 de junio de 2016

EL TURISMO DIGITAL EN ESPAÑA DEMANDA PUNTOS DE RECARGA ELECTRICA ULTRARAPIDA PARA DISPOSITIVOS ELECTRONICOS

El turismo español necesita digitalizarse. Al menos ponerse al día para cubrir  la creciente demanda de puntos públicos de recarga veloz eléctrica para dispositivos electrónicos como móviles y tabletas entre otros.




Una de las quejas más habituales de los turistas en España se refieren a que una vez agotadas las pilas/baterías del dispositivo portátil resulta arduo encontrar un enchufe en la vía pública donde recargarlo. En muchas ocasiones han de acudir a sus habitaciones de hotel. Las cafeterías y espacios públicos, que cada vez más apuestan por ofrecer cobertura Wi.Fi (gratuita y/o de pago) a su clientela, no han deparado en ofertar igualmente "enchufes ultrápidos" para los mismos artilugios.

Las ciudades más turísticas de España, bien harían en idear un plan de puntos ultra-rápidos de recarga eléctricas para los dispositivos electrónicos por medio de por ejemplo farolas, marquesinas de paradas del transporte público, o incluso de #árboles #solares para urbanizar la sombra en espacios muy soleados y con altas temperaturas, al mismo tiempo que facilita los enchufes eléctricos y recortar los tiempos de recarga siguiendo así el mismo ejemplo de las estaciones solares de recarga para vehículos eléctricos.

El reto recae ahora en urbanistas, diseñadores de espacios públicos, pero también en fabricantes de farolas y/o árboles solares para facilitar y extender los puntos de recarga eléctricos ultra-rápidos para autóctonos y turistas que visiten las grandes ciudades. El #turismo #digital haría de España un interesante destino a explotar.