Acabo de leer en cierto blog de Martin Varsavsky una noticia sorprendete en el que se anuncia la decisión de la multinancional americana Pfizer de dar Viagra gratis a la gente que se quede sin trabajo. Bueno, como siempre el tema es que para recibirla gratis ya hay que haber estado tomando Viagra antes de perder el trabajo y pagando por ella. Esto recuerda las iniciativas de algunos operadores de telefonía o utilities que han prometido un descuento en su factura mensual a los que se hayan quedado en paro en España. Falta por ver en qué términos se cumplimenta en efecto esas ocurrencia marketenianas, aunque lo importante era conseguir el efecto mediático más que otra cosa.
Está visto que con la crisis económica, a algunos se nos agudiza el ingenio, la creatividad, la líbido y hasta algunos órganos. Cualquier cosa menos llorar. Los laboratorios fabricantes de Viagras o de sus homólogas píldoras Levitras o Cialis, sí que se sonarán la nariz cuando amaine la recesión aunque -a diferencia de los parados- con los bolsillos llenos. Por si acaso, los inscritos en el INEM deberían ir ofertando ya pañuelos de papel a mitad de precio a los autores de tantas campañas ingeniosas de RSC destinadas a la masa desempleada para festejar el fin de la crisis. ¿Hará lo mismo el Gobierno de ZP con su píldora postcoital o abortiva a las que pierdan el trabajo?