La Economía Verde es un sector emergente en España y con bastante recorrido en comparación con otras potencias del mundo. De acuerdo a ciertos cálculos, la economía verde podría generar en España más de 2 millones de empleos, elevar el PIB y generar cientos de oficios y profesiones nuevas. Al nivel de destrucción del entorno natural que llevamos será imposible la paz, la democracia y convivencia. Todo lo contrario: los desastres naturales, los conflictos, las guerras y la cada vez mayores ingentes sumas de dinero para su mitigamiento se irán acrecentando. Planeta Tierra sólo tenemos uno.
- Cambio climático y energía: reducir las emisiones de forma importante como forma de luchar contra el cambio climático, fomentando una Ley de cambio climático que mejore la Eficiencia energética y energías renovables.
- Construcción sostenible: una manera de reactivar el sector de la construcción en España podría pasar por rehabilitar el parque de más de 10 millones de viviendas en todo el país (tanto privada como pública) con unos deficientes índices de eficiencia energética: derrochando energía, agua, calefacción, emisiones de CO2, residuos, etc tanto en fachadas como suelos, techos, paredes e interiores. Otra medida pasaría por fomentar los consumos verticales de energía renovables.
- Transporte y movilidad: supeditar la construcción de infraestructuras a la demanda real y alentando una movilidad sostenible, dentro de la cuál el ferrocarril y la red de transporte público sea un medio de prioritario para personas y mercancías.
- Calidad del aire: marcarse la meta de que toda la población respire aire sano, no contaminado, antes de 2015.
- Residuos: incidir en el reciclaje y la reutilización de residuos, incrementando los porcentajes y calidad de este servicio, con medidas como la prohibición de las bolsas de un sólo uso antes del 2013 y con Sistemas de retorno de envases.
- Biodiversidad: Mejorar la gestión de Red Natura 2000 para maximizar sus objetivos y cumplir el Plan Estratégico de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, así como elaborar los planes sectoriales. Máxima prioridad a las zonas verdes, forestales y espacios protegidos , todos ellos como pulmones de oxígeno y compensadores del Co2 en la atmósfera. Cada humano precisa de unos 22 árboles al año para respirar oxígeno.
- Medio Marino: Respetar la Ley de costas sin un deterioro de las mismas, trabajar por el futuro de la pesca y seguir invirtiendo recursos en la Red Natura 2000 marina.
- Agua: que el precio del agua refleje con fidelidad los costes de extracción, transporte y tratamiento, mejorando la política hidrográfica, la construcción de grandes embalses, trasvases entre cuencas y vigilando los acuíferos. El exceso de consumo tiene que tener los días contados porque es un recurso natural muy limitado.
- Medio rural: Secundar la apuesta europea por una agricultura más verde que promociona los productos locales y un sector agrícola sostenible. Por otro lado, potenciar la vida en entornos rurales y ciudades pequeñas con mayor calidad de vida y salud, desmasificando las grandes urbes por la falsa creencia que el futuro es urbanita.
- Fiscalidad ambiental: una Ley de fiscalidad ambiental que reduzca los impuestos indirectos a los productos “más verdes”, y al contrario, que penalice las actividades empresariales que atenten contra el entorno, incentivando a las empresas sostenibles. Quien contamina que pague.
- Consumo responsable: No tiene ningún sentido "consumir por consumir" provocando una importante huella ecológica, como consecuencia del derroche energético y proliferación de residuos imposible de gestionarse, al mismo tiempo que agotamos nuestro escaso patrimonio natural.
- Las nuevas tecnologías (TIC´s): son un factor de competitividad y de sostenibilidad importante ahorrando en desplazamientos innecesarios, contaminación, energía, C02, tiempo y recursos. Smart ctities y la domótica en casa ayudan a racionalizar el consumo energético. La democratización de la banda ancha no sólo puede crear 2 millones de empleos nuevos en España sino que mejora la competitividad así como fomenta la formación y educación permanentes.
- PIB-e: Ya es hora que se haga una valoración económica de las "externalidades" del conjunto de las actividades productivas del país con impacto ambiental que no se reponen. En este sentido se multiplican voces autorizadas que reclaman el cálculo del Producto Interior Bruto Ecológico